Descubre lo fácil y divertido que es cuidar nuestro planeta.
Usa solo lo que necesitas:
Antes de pedir algo nuevo, revisa si puedes usar
lo que ya tienes.
Reducir significa pensar antes de usar algo para generar menos basura.
¿Todavía sirve o alguien más lo podría usar?
¿Puedo repararlo?
¿Puedo darle otro uso en casa?
Dale más vidas a las cosas:
Cada objeto tiene más de un uso. Antes de desecharlo, piensa en cómo puede seguir sirviendo
para algo más.
Reutilizar es darle una segunda oportunidad a las cosas. ¡No todo lo viejo debe ir a la basura!
“¿Alguna vez estuviste a punto de tirar una cosa pero tus papás te dijeron que aún se puede utilizar?
De eso se trata reutilizar, pregúntale siempre a tus papás si de verdad ya no tiene uso lo que estás por tirar.”
Antes de tirar,
algo, pregúntate:
Separar bien ayuda a reciclar:
Separa la basura en orgánica (restos de comida) e inorgánica (papel, plástico, vidrio, latas, etc.).
Reciclar ayuda a que los materiales tengan una nueva vida. ¡Separar bien hace toda la diferencia!
Algunas cosas ya no se pueden reutilizar ni reciclar, pero aún podemos aprovecharlas
de otra manera.
Antes de tirar
algo, pregúntate:
¿Puede servir para otra cosa antes de ir a la basura?
¿Se puede devolver a la naturaleza sin contaminar?
¿Se puede convertir en algo útil de otra forma?
Devolver a la naturaleza:
La naturaleza nos enseña a recuperar: las hojas caen, se descomponen y alimentan
la tierra para que crezcan más árboles.
Recuperar es encontrar formas
de aprovechar cada cosa hasta
el final. ¡Nada debería desperdiciarse!